En el fondo que te veas eligiendo y que te “tire más” el plan con los amigos que con él es la primera pista de que has tomado la decisión correcta. A fin de cuentas no se puede negar lo que de verdad te apetece. Básicamente, si una relación no te aporta lo suficiente para que te compense asumir los “sacrificios” o elecciones, es que no funciona.
O dicho de forma más normal “si siempre te apetece más o prefieres quedar con los amigos que con tu pareja, es que la cosa empieza a flojear”. Con una relación de más tiempo o implicación emocional puede merecer la pena trabajarlo. Pero desde donde estás tu, parece que la oferta de casarse y comprar una nueva casa era lo que quería él, no lo que tu querías. Imagínate el movidón si sigues adelante, te casas, te metes en una hipoteca o un alquiler más caro y terminas llegando a la misma conclusión de que prefieres ir con tus amigos, que te limite demasiado. Eso sí que sería un drama.
Pero bueno, ya te llegará la experiencia “master del universo”. XD