Me he reído. Aquí en Madrid hay una calle que está llena de tiendas para Chinos. Fuimos porque un amigo quería una de sus ollas eléctricas para hacer arroz al vapor, que se ve que es un electrodoméstico típico de allí, pero que aquí no es común. Y de pronto vimos un montón de supermercados que vendían los cuencos, los palillos y todo al por mayor. También vendían la carne y las especias típicas, muchas que no reconocimos.
Total, que para quienes les guste la comida exótica cada vez es más fácil de encontrar si sabes cómo buscar por “los mundos de internet”. Supongo que cada vez quedan menos misterios. hahaha